Por qué todos los nuevos edificios de Londres son idénticos
Si caminaste por partes renovadas de Londres, recientemente, es posible que hayas notado un tipo de edificio inquietantemente similar. Cada borde es tan nítido y plano que mirarlo de frente te da la extraña sensación de que el mundo se ha convertido temporalmente en 2D. Este estilo único se convirtió en el estándar hegemónico para los desarrollos de viviendas en Londres. Apodado New London Vernacular (NLV), tiene tres marcadores clave: muchos ladrillos, ventanas con retratos hundidos y fachadas planas. El nombre es utilitario, para que coincida con su actitud: New London para marcar su edad y ubicación, y vernáculo para describir su propósito definitorio, que es hablar en términos generales el mismo dialecto que algunas de las propiedades más valiosas de la capital.
NLV es una trampa para los planificadores, que tuvieron que cumplir con la Guía de diseño de viviendas de Londres desde 2010. Esta guía explica exactamente lo que debería ser NLV: "Gran arquitectura de fondo". Provino del escritorio del entonces alcalde de Londres, Boris Johnson, cuya marca en el frente de las viviendas contemporáneas de Londres sobrevivirá por mucho tiempo. Los desarrolladores se sienten atraídos por la discreción que ofrece NLV porque todo, desde un estudio hasta un ático, se pueden ubicar en estas fachadas, lo que significa que pueden atraer a una variedad de compradores.
El estilo entró en el discurso de la arquitectura dominante en 2012, en un informe de Design for Homes and Urban Design London (UDL). El informe establecía un vínculo directo entre los edificios identikit que aparecían en los concursos de arquitectura y las condiciones políticas y económicas de la época. La directora de la UDL, Esther Kurland, coautora del informe de 2012, escuchó por primera vez sobre este nuevo estilo cuando oyó a Johnson dar una charla en el Ayuntamiento. Lentamente, cada nuevo desarrollo y participación en la competencia que vio comenzó a tener el mismo aspecto.
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Hay un cierto nivel de falsedad en todo esto. Escribiendo sobre el redescubrimiento del amor de Londres por el ladrillo en el Financial Times en 2016, Edwin Heathcote se preguntó si todas estas grandes fachadas envueltas en ladrillo son "solo una estratagema". Los ladrillos y la argamasa se asocian con una sólida confiabilidad, pero las torres de ladrillo son una ilusión. Las paredes de ladrillo solo pueden subir hasta cuatro pisos sin soporte, mientras que las nuevas fachadas de ladrillo que se elevan hacia nuestros cielos están pegadas a soportes y sostenidas por secciones de acero. “A menudo me pregunto, si tuvieras una buena carrera con algunos amigos, si pudieras empujar un sofá a través de una de esas paredes”, dice Andrew Waugh, cofundador de Waugh Thistleton Architects.
La alcaldía de Londres insiste en que sus nuevas casas deben parecerse a las casas antiguas, solo que nuevas, y más. Así que la ciudad ha terminado con infinitas variaciones de una terraza georgiana que parece haber sido renderizada en Minecraft. “Es la perpetuación del statu quo disfrazado de sensibilidad”, dice Adam Nathaniel Furman, quien crea coloridas intervenciones arquitectónicas para Londres. Para ellos, el estilo celebra un “pasado compartido imaginario que en realidad es solo una falsa nostalgia”.
También deja poco espacio para la innovación. NLV fue en parte una reacción a las décadas anteriores, donde cada desarrollador buscaba un hito. Después de la crisis financiera de 2008, los desarrolladores, preocupados de quedarse con algo que les costaría vender, se volvieron cada vez más conservadores. Si bien la idea de que las casas no se vendan parece risible en el sobrecalentado mercado inmobiliario de Londres de hoy en día, la naturaleza de ladrillo por números de NLV se ha granjeado el cariño de los desarrolladores al proteger sus resultados. Y funciona bien para los desarrolladores que buscan limitar los costos de construcción, porque todos estos edificios tienen detalles similares, por lo que significa que los subcontratistas no necesitan comenzar desde cero con cada esquema de construcción diferente.
Este enfoque de corte de galletas no cayó bien entre los críticos. Peter Cook, el arquitecto renombrado por sus atrevidos diseños para ciudades fantásticas como parte del colectivo radical Archigram, se refirió despectivamente a la tendencia como arquitectura de "galletas beige y banales" en un discurso de 2016 pronunciado en los premios Architects' Journal. Seis años después, Londres parece una lata de galletas entera. Pero la culpa no recae completamente en los arquitectos, particularmente en aquellos que se encuentran al principio de su carrera y que trabajan muchas horas por un salario bajo en proyectos insatisfactorios. Cada vez más, los estudios compiten para socavar a los demás, atrayendo a los desarrolladores con las tarifas más bajas y los plazos de entrega más rápidos. La estética de copiar y pegar de NLV es una necesidad para un equipo de diseño que trabaja con plazos vertiginosos; también atrae a los clientes, al mantener los costos bajos para los subcontratistas que no necesitan aprender nuevas técnicas para ejecutar cada proyecto.
Al menos las galletas pueden ser carbohidratos confiables, incluso si son un poco insulsas. El ladrillo resiste bien y no se ve cansado ni viejo. Es mejor que un revestimiento superficial y potencialmente peligroso, al menos. El estilo también tiene una escala concienzudamente humana, con puertas que se abren a la calle y un enfoque en balcones y ventanas bien proporcionadas. Es mejor que todos nos acostumbremos; NLV parece estar extendiéndose fuera de los límites de la capital en una marea galletera imparable. "Veo más afuera de Londres que ahora", me dijo Kurland. La próxima tendencia arquitectónica de Gran Bretaña bien puede ser de pared a pared revestida de ladrillo de Galletas Conservadoras Vernáculas.
Fuente: The Guardian/ Traducción: Horacio Shawn-Pérez
