“Estamos en una era de ciudades-estado y es cuestión de tiempo para que los gobiernos se den cuenta”
“Las ciudades se encuentran situadas en primera línea de la
mayoría de los desafíos del siglo XXI: competencia económica e inclusión,
cambio climático y resiliencia, cambio tecnológico e implementación”, dijo el
urbanista Bruce J. Katz, nacido en Brooklyn, Nueva York, en 1959, y perteneciente
a la influyente Institución Brookings con sede en Washington; su último libro
es The New Localism: How Cities Can Thrive in the Age of Populism. “El mayor
desafío es que, en muchos lugares del mundo, las ciudades están solas a la hora
de resolver estos problemas. Los gobiernos nacionales han sido secuestrados por
el partidismo o por su mal funcionamiento y los líderes públicos, privados y
cívicos de las ciudades deben descubrir y probar nuevas soluciones a los
problemas modernos”.
En una reciente entrevista, comentó que, en su opinión, “funcionalmente
estamos en una era de ciudades-estado, y es cuestión de tiempo para que los
gobiernos se den cuenta. Para muchos de problemas (inmigración, refugiados, medio
ambiente), estamos aprendiendo que los compromisos verbales de los gobiernos
nacionales pueden importar menos que las acciones de las principales ciudades.
Es lo que queremos decir cuando nos referimos a que el poder pertenece a quienes
solucionan los problemas: el poder se desplaza de los gobiernos estancados a
las comunidades que disponen del mercado y del poder cívico para implementar el
cambio”.
La idea es que las ciudades son usinas de resolución de
problemas. En lugar de esperar respuestas de los gobiernos centrales, empiezan
a conectarse entre sí y crear sus propios sistemas de respuestas a demandas
específicas y generales.
Al respecto, dice Katz: “En un mundo donde las ideas se
comparten a través de redes mundiales de ciudades que comparten lecciones,
ejemplos y modelos perfectos y adaptan y ajustan las innovaciones de otra
ciudad a la suya. Hasta la fecha, esto se ha perfeccionado en torno a redes de
temas específicos, como el Grupo de Liderazgo C-40, que se centra en el cambio
climático y la resiliencia. Creo que a medida que las ciudades sigan siendo el
centro de la resolución de problemas, habrá redes de ciudades más formalizadas
que se buscarán para crear nuevas ideas y nuevas soluciones, en lugar de mirar
hacia arriba a sus gobiernos estatales o nacionales en busca de una orientación
o asistencia técnica”.